Ciudad Juárez— Hasta el próximo cambio de semáforo o modificación que se realice al decreto de restricciones por Covid-19, los centros de entrenamiento de esta ciudad podrán reactivar operaciones, bajo un estricto modelo de medidas preventivas, según dio a conocer la agrupación Gimnasios Unidos Juárez.

Apenas el pasado jueves representantes de gimnasios de Ciudad Juárez sostuvieron una reunión con la subsecretaria de Prevención y Promoción de la Salud del Estado y con el director médico de la Zona Norte, Arturo Valenzuela, con la intención de presentar algunas propuestas para la reapertura de estos negocios.

A través de un comunicado, Gobierno del Estado señaló que tras analizar los métodos presentados, se contemplaría la apertura de estos espacios durante los primeros días de enero, mediante un reforzamiento de todas las medidas de higiene y sana distancia.

Por su parte, Cristopher Ramírez, representante de Alcatraz Gym e integrante de Gimnasios Unidos Juárez, indicó que durante la reunión, se acordó la reapertura de estos espacios durante el próximo cambio de semáforo, o bien, cuando las autoridades estatales anunciaran una modificación al decreto Covid-19.

“Llegamos a un acuerdo positivo, presentamos nuestros protocolos de apertura y los lineamientos que vamos a estar teniendo y fueron aceptados, así que el próximo cambio de semáforo o anuncio del nuevo decreto por parte del gobernador, será publicado nuestro gremio y otros sectores para la apertura controlada”, comentó.

“Nos aceptaron los tres modelos, sin embargo, aún seguimos peleando que el gimnasio tipo ‘A’, que contempla instalaciones médicas, nos permitan operar aún en rojo, pero el resto de los gimnasios podrán funcionar estando en naranja, amarillo o verde. Aún no nos dan una fecha específica, hay rumores que indican que podría darse hasta el 15 de enero, pero esperamos que pueda ser antes de que termine el año o durante la primera semana del 2021”, agregó.

En el documento presentado a Gobierno del Estado se señaló que en la entidad existen alrededor de 400 gimnasios, los cuales han dejado de generar más de 720 millones de pesos durante el período de nueve meses de cierre, afectando de manera considerablemente a proveedores, socios comerciales, acreedores, servicios públicos y principalmente a clientes.

Entre las propuestas presentadas se destacó como primera opción la implementación de gimnasios tipo “Health Center”, los cuales tendrían la capacidad de abrir en cualquier color del semáforo epidemiológico, y deberá contar con una licencia sanitaria expedida por la Comisión Estatal para la Prevención contra Riesgos Sanitarios (Coespris), para la operación de un consultorio de fisioterapia, así como de terapia física y ocupacional.

Como segunda opción, se propuso a las autoridades que los gimnasios pudieran abrir en el semáforo en naranja con un aforo del 25%, aumentarlo al 50% en fase amarilla y 100% en color verde. Asimismo se contempla la implementación de un protocolo estricto para evitar contagios por Covid-19.

En este modelo se contemplaría la instalación de un filtro de ingreso, con la implementación de tapete desinfectante, registro de temperatura y la adecuación de lavabos en la recepción, asimismo se sugiere que el usuario acceda al gimnasio con dos toallas; también quedaría suspendido que clientes alternen aparatos durante sus rutinas, además de que se llevará a cabo un programa de desinfección en las instalaciones cada dos horas.

Dicho protocolo contaría con una bitácora de limpieza que estaría a disposición de las autoridades sanitarias para su revisión. En el caso de los baños, se propuso un programa constante de fumigación, eliminación de mingitorios, entre otras medidas de control; también se pedirá que el personal cuente con careta de protección, cubrebocas tipo N95 y guantes para la atención al cliente.

Mientras que instructores y entrenadores serían capacitados para el uso de protección, también se recomendó la instalación de múltiples estaciones con papel y aspersores con desinfectante para los usuarios en el equipo o máquinas, así como aspersores extras en todas las áreas y despachadores de toallas desechables y gel antibacterial.

Los aparatos y unidades para ejercitarse deberán estar separados y contar con señalización para llevar un orden. Las rutinas también serían modificadas para hacerlas de bajo impacto.

El último modelo presentado toma las medidas antes mencionadas, añadiendo una certificación a los trabajadores en un curso sobre prevención de Covid-19.

Asimismo, se sugirió a las autoridades la creación de un consejo de gimnasios con la tarea de inspeccionar y auditar a estos establecimientos para que cumplan el compromiso.

elara@redaccion.diario.com.mx

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