Camargo– Mientras que el fiscal general del Estado, César Augusto Peniche Espejel, lamentaba la ejecución de cuatro agentes de la Policía Municipal de San Francisco de Conchos y atribuía el hecho a un grupo de la delincuencia organizada ubicado en Parral, en el pequeño municipio turístico se vive una tensa calma.

Con la baja de los cuatro elementos ejecutados, la pérdida de cuatro armas largas y cuatro cortas y la deserción de un policía más en las últimas horas, San Francisco de Conchos queda con apenas seis elementos y un oficial de vialidad, todos escasamente pertrechados y replegados en la Comandancia de donde se niegan a salir argumentando no contar con equipo suficiente y la necesidad de refuerzos.

Desde el director de seguridad pública, Edilberto Herrera Pavía, el endeble estado de fuerza de San Francisco de Conchos considera un acto suicida el salir a patrullar los alrededores.

Es por esto que el alcalde Jaime Ramírez Carrasco se presentó el martes ante el fiscal para solicitar un grupo de elementos y solventar la grave situación de inseguridad que se vive en esta región.

Más tarde, el alcalde informó que sólo personal del Ejército estaría apoyando a los agentes locales y que será hoy cuando pida la presencia del Fiscala General para definir la emergencia, así como la permanencia de los elementos que quedaron.

Desde el levantamiento de los cuatro agentes el domingo pasado por la noche, el municipio no registra ningún hecho que trastoque el movimiento cotidiano en el tranquilo municipio de pescadores, agricultores y prestadores de servicios turísticos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *