Los migrantes fugados que cruzaron el río Suchiate para entrar ilegalmente a México, tras enfrentamiento a golpes y pedradas con la Guardia Nacional, serán detenidos y deportados.

El Instituto Nacional de Migración (INM) del Gobierno de México anunció que actuarán para detener a los que irrumpieron ilegalmente, con el fin de comenzar el trámite de deportación a su país de origen.

En comunicado oficial narró el INM los hechos de esta mañana, al afirmar que actuaron “con total responsabilidad ante la petición de personas migrantes que solicitan ingresar a México por la frontera sur”, en su mayoría provenientes de Honduras.

Señaló la autoridad mexicana que “se les invitó a entrar de manera ordenada al país y con base en la Ley de Migración, dando prioridad a los grupos vulnerables. Sin embargo, sus dirigentes convocaron a cruzar el Río Suchiate, sin considerar los riesgos para menores de edad y mujeres”.

Por tanto, agentes federales de Migración realizan operativo y “trasladarán a las estaciones y estancias migratorias a toda persona extranjera que no acredite una condición de estancia regular”.

Luego de detener a quienes irrumpieron, resolverán su situación jurídica “y en su caso, se llevará a cabo el retorno asistido a su país”, es decir, deportación.

Temprano este lunes 20 de enero comenzaron miles de centroamericanos a buscar cómo ingresar a México. Muchos cruzaron el río Suchiate que separa Guatemala de Ciudad Hidalgo (Chiapas, México), lo que creció en enfrentamientos con la Guardia Nacional (GN).

Algunos migrantes lanzaron piedras a los antimotines de la GN para intentar escapar.

Cientos lograron entrar a México ilegalmente. La Guardia y el INM reportaron que frenaron a un grupo de 800 migrantes de la caravana.

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