El expugilista estadounidense reveló su método para salir avante en las pruebas antidopaje a las que fue sometido durante su carrera profesional en el boxeo.
Tyson contó para la cadena deportiva ESPN, ahondando en explicaciones, cómo, en primera instancia, entregaba muestras de orina de su esposa. Y al quedar embarazada, el boxeador tomaba secreciones de sus hijos para evitar suspensiones.
«Utilizaba la orina de mi esposa pero me dijo: En los resultados dirán que estás embarazado, por ello mejor recurrí a la de mis hijos».
Mike también afirmó que cuando los controles antidoping lo requerían, él utilizaba un pene falso de plástico, para engañar al doctor que vigilaba sus estudios y de esa manera vertir la orina de sus hijos.
«Es que tienes el «consolador», el pene falso. La mayoría de los hombres, aunque sean gays, se incomodan al ver tu aparato, por ello, cuando lo sacaba ellos se volteaban y yo aprovechaba».
Fuente: www.elimparcial.com