Chihuahua.- María Salgueiro, activista y experta en el tema de Feminicidios, expuso que Chihuahua fue el último estado que tipificó el femenicidio como un delito, ya que lo hizo en el 2017. Precisó los factores que se deben considerar para que exista un delito que se tipifique como crimen de género.

Expuso que existen varias condiciones que existen en Chihuahua que influyen directamente en el crimen hacia las mujeres, como la violencia generada por el crimen organizado.

Precisó que Chihuahua con 192 carpetas de investigación es el tercer lugar en casos, considerando el número de crímenes por cada 100 mil habitantes, y con estas estadísticas se considera una epidemia según organizaciones internacionales.

Indicó que en Chihuahua se ha tenido que separar los crímenes entre los que ocurren en condiciones no vinculadas con el crimen organizado y las que si se pueden vincular, los cuales han sido delitos muy violentos.

Añadió que a pesar de los indicativos de violencia en el entorno, la mayoría de los femenicidios se relacionan con alguien cercano de la familia o en las inmediaciones de su casa.

Expuso que en el caso de Juárez se ve una relación directa con la actividad de grupos como los Mexicles y Aztecas y el aumento de los crímenes contra las mujeres, lo que se marcó en el 2018.

Añadió que los femenicidas arrojan los cuerpos de las mujeres a fosas clandestinas que usa el crimen organizado, al grado qué hay grupos usan los cuerpos de más víctimas para enviar mensajes entre ellos.

Expuso que en el caso de la ciudad de Chihuahua, hay varios colonias que destacan por la incidencia, como Riberas de Sacramento y Praderas del Sur, mientras qué hay regiones que se destacan por ser donde son arrojados los cuerpos de mujeres asesinadas.

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