Y los mininos han tenido que pagar con su vida, ya que desde 2015 el Gobierno australiano arrancó un plan de exterminio a cinco años contra 2 millones de gatos.
Australia es un crisol de la naturaleza. Su flora y fauna es única, gracias a que sus condiciones geográficas le permitieron vivir aislada durante más tiempo que el resto de los continentes, publica Actitud Fem.
Es hogar de miles de especies endémicas y muy importantes para su ecosistema; fue así que al ser introducido el gato, su multiplicación, se ha convertido en una amenaza.
Hoy día miles de gatos ferales están llevando al borde de la extinción a varias especies.
El sacrificio de gatos ha levantado reacciones en muchas partes del mundo, ya que son considerados animales de compañía.
Con información de El Imparcial