«Para que no graviten sobre el gasto público las pensiones militares, el Presidente (Andrés Manuel López Obrador) quiere que el Tren Maya contribuya en el pago de estas pensiones militares», dijo en entrevista Rogelio Jiménez Pons, director general del Fondo.
Sin embargo, todavía está por definirse si todas las ganancias se usarán únicamente para el pago de estas pensiones o para otras necesidades del Ejército.
El Tren Maya es un proyecto ferroviario de pasajeros, turístico y de carga ubicado en el sureste del País, que tendrá una demanda de 325 mil pasajeros diarios, según estimaciones del Gobierno federal.
«El tren era un gran medio que se abandonó (en el pasado) y hoy tenemos un grandísimo rezago. Para evitar que vuelva una tendencia privatizadora, tenemos a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) que tiene sus intereses involucrados, entonces va a evitar la privatización de este importante patrimonio nacional que son los ferrocarriles, en este caso el Tren Maya.
«El Tren Maya va a ser muy buen negocio indudablemente y no queremos que a futuro se generen tentaciones privatizadoras», declaró.
Jiménez Pons sostuvo que esta decisión fue analizada por el Presidente López Obrador desde el año pasado, por lo que no se tata de algo improvisado.
Desde principios de este año, el Ejército ya está involucrado en esta mega obra, debido a que tendrá a su cargo la construcción de los tramos 5 Sur, 6 y 7.
Jiménez Pons resaltó que la coordinación del desarrollo de este proyecto seguirá a cargo de Fonatur, quien una vez terminada la construcción lo entregará al Gobierno federal y este a su vez a la Sedena.