«Me quitaron de un golpe la tranquilidad con la que me movía en la Ciudad de México», dijo Siomara, de 21 años, a quien intentaron secuestrar en el Metro de la capital.

 Pero el guardia del transporte se dio cuenta de que algo raro estaba pasando y por radio le llamó a uno de sus compañeros.

 El secuestrador, al sentirse acorralado, le dijo a la joven que eso no se iba a quedar así.

 Su caso es uno de la ola de secuestros que se han presentado en las +ultimas semanas en la capital del país.

 La organización Alto al Secuestro refirió que en tan sólo un mes, de junio a julio, los raptos repuntaron un 50 por ciento.

 Según las cifras, el mes pasado se abrieron 237 carpetas de investigación con respecto a dicho delito. En tanto, en julio de se registraron 158 casos de secuestro.

 Las cifras reflejan la cruenta situación que actualmente afronta el país. Algunos de los hechos que influyeron para que se dispararan las estadísticas son los raptos de migrantes y el secuestro masivo de trabajadores en el paraíso mexicano (Cancún, Quintana Roo).

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