Marcelo Ebrard, canciller de México, leyó la nota diplomática que entregó la dependencia que él dirige, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), a la Embajada de Estados Unidos, acerca del operativo.
En video publicado por redes sociales, Ebrard declaró al final que “solicita el Gobierno de México toda la información sobre el operativo ‘Rápido y Furioso’” por posibles violaciones a la ley.
El escrito que entregó refiere que la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF) de Estados Unidos encabezó en 2009 la operación con la que “2 mil armas de fuego entraron al país para rastrear la compra-venta en México”.
La operación tenía el objetivo de encontrar a los grupos criminales que traficaban armas en México, sin embargo, resultó en que fueron usadas para cometer delitos, particularmente asesinatos en el marco de la guerra contra el narco en Estados Unidos, en tierras mexicanas y en otros países.
Aseveró Ebrard que “no se ha cumplido el objetivo” de la operación porque “ha seguido creciendo el tráfico ilícito de armas” y “la cooperación no ha sido aclarada”.
Lamentó el canciller que la administración de aquel entonces del gobierno de México conocía el caso, porque de no ser así, Estados Unidos estaría actuando en territorio mexicano, violando la soberanía nacional.
Expresa Ebrard que posiblemente ocurrió una violación a las leyes “por parte de quienes ocuparon los puestos más altos del país” (…) “o entonces los Estados Unidos actuaron en territorio nacional sin conocimiento del gobierno y entregaron armas al crimen organizado», por lo que se violó la soberanía nacional de México.
La FGR de México envió solicitud en septiembre del 2019, ratificada febrero del 2020, donde pide información del caso, por lo que ahora la Cancillería impulsa el caso con esta nota diplomática formal.