Pese al constante arribo de personas en situación de movilidad, autoridades y organizaciones no gubernamentales estiman que la cantidad de migrantes en Ciudad Juárez disminuyó en las últimas dos semanas de un promedio de 12 mil a 15 mil personas a un estimado actual de no más de 10 mil. 

Aunque constantemente arriban grupos de personas a la ciudad, principalmente a bordo del tren de carga, en los últimos días la mayoría se han ido directo al bordo del río Bravo, en donde han permanecido hasta dos días en espera de ser recibidos por las autoridades de Estados Unidos, informó Enrique Valenzuela, coordinador del Consejo Estatal de Población (Coespo). 

“En el CAIM (Centro de Atención Integral para el Migrante) está llegando poca gente, la afluencia de personas en situación de movilidad procurando atención humanitaria ha disminuido”, indicó el funcionario estatal. 

De acuerdo con las estimaciones del Gobierno del Estado, alrededor de 2 mil 200 migrantes provenientes de Centroamérica se encuentran varados en la capital del estado en espera de poder continuar su trayecto a Ciudad Juárez, con la esperanza de cruzar la frontera a Estados Unidos.

Estas personas han recibido agua, alimentación y servicios médicos en coordinación con la autoridad estatal, el Ayuntamiento capitalino, y la participación voluntaria de diversos ciudadanos que han acudido sobre todo a la estación Tabalaopa de Ferromex, donde se encuentra el mayor número de migrantes.

Santiago de la Peña Grajeda, secretario general de Gobierno, afirmó que en la mesa de seguridad celebrada ayer de manera virtual, se les informó por parte del Instituto Nacional de Migración (INM) que había un compromiso con autoridades estadounidenses para evitar que continúe el avance de migrantes a Ciudad Juárez, población en la que se estima, hay por lo menos 12 mil personas en situación de movilidad en espera de resolver su estatus migratorio.

Thiago Almeida, jefe de la oficina de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) en Ciudad Juárez, también informó que han detectado una disminución en el número de personas en la frontera, y aunque está llegando mucha gente a la ciudad, estimó que actualmente hay menos de 10 mil personas. 

“¿Qué pasa?, que mucha gente está llegando, en los trenes, en los camiones, y llegan directo al bordo para intentar cruzar sin cita (…) esta semana, estas últimas dos semanas mucha gente se intentó cruzar a Estados Unidos”, explicó. 

Informó que mientras que hace semanas eran atendidas hasta 800 personas en un solo día en el comedor para migrantes en Catedral, esta semana el promedio fue de 120 a 150 personas. 

Agrupaciones locales que apoyan a las personas en situación de movilidad también destacaron la menor presencia de migrantes en busca de apoyo, mientras que en el bordo del río Bravo son más visibles los grupos de gente caminando en busca de un sitio por dónde cruzar la frontera. 

De acuerdo con organizaciones y el monitoreo de Coespo, en las últimas dos semanas los espacios humanitarios en Juárez han mantenido un porcentaje de ocupación entre el 58 y el 75 por ciento, con un promedio de mil 624 a 2 mil 115 personas y una capacidad de alojamiento disponible de entre 685 a mil 176 espacios. 

Lo anterior a diferencia de la primera semana de septiembre, cuando la ocupación en los albergues era entre el 90 y el 110 por ciento, debido a que una gran cantidad de personas que arribaban a la ciudad en tren buscaban un refugio para esperar su ingreso regular a Estados Unidos a través de la aplicación móvil CBP One. 

Estado no puede retener a migrantes

De acuerdo con la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSPE), el Gobierno del Estado no está facultado para retirar o retener a migrantes que, en su mayoría, se encuentran en los patios de resguardo de Ferromex, al indicar que esto es competencia de las autoridades federales que se apoyan con la Guardia Nacional.

La SSPE informó que únicamente intervienen de manera preventiva para evitar la comisión de delitos que pongan en riesgo la integridad de los migrantes, o bien, de las personas que habitan en las ciudades por las que transitan en su paso hacia el vecino país.

El secretario general de Gobierno manifestó que, desde el pasado viernes en la reunión binacional que se realizó con autoridades de México y Estados Unidos, el propio INM se comprometió a que haría lo necesario para impedir que las personas migrantes continúen haciendo uso del tren para llegar a la frontera, esto por el descontrol que se ha generado y también por un tema de seguridad.

Manifestó que el INM le notificó al Gobierno del Estado que tendrá presencia en los patios de Ferromex con la intención de que los migrantes regresen a sus países de origen haciéndoles saber que la frontera con Estados Unidos no está abierta para una migración de este tipo. 

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