Autoridades federales anunciaron que la Fuerza Aérea Mexicana (FAM) liberará moléculas de yoduro de plata en las nubes para propiciar lluvias en tres estados del norte de México, Chihuahua entre ellos.

La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) informó que junto con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) iniciará  el Proyecto de Estimulación de lluvias en los estados de Sinaloa, Sonora y Chihuahua, para el beneficio de productores agrícolas y ganaderos.

En la última semana de este mes de juio, comenzarán con Sinaloa, cuando esperan que se presenten las condiciones de nubosidad apropiadas para el operativo.

Contemplan un trabajo de tres meses, en los que enviarían de 20 a 25 vuelos con los reactivos para lanzarlos en las nubes y aumentar la eficiencia en esta temporada agrícola.

Por medio de un comunicado adelantaron que la FAM aportó al proyecto dos aviones King Air 350i, uno listo para operar en la Base Aérea militar de Culiacán, Sinaloa, mientras que el otro ya se encuentra en Chihuahua.

Las aeronaves, que fueron modificadas por especialistas mecánicos e ingenieros de la FAM, tienen una capacidad de reacción inmediata para las condiciones de operación que se requieren, además se cuenta con pilotos experimentados.

La Sader publicó imágenes sobre las pruebas que realizaron anteriormente en Baja California sobre este proyecto:

La planeación y programación de este tipo de vuelos realizan desde el análisis de las condiciones meteorológicas por parte de meteorólogos de ambas dependencias y sustentadas con información obtenida mediante aplicaciones móviles e imágenes satelitales.

El objetivo es mitigar la sequía en beneficio de las zonas de temporales, pastizales, maizales y cultivos tradicionales y de una forma colateral se esperan escurrimientos a las presas, con lo cual se beneficiará a un mayor número de productores de los tres estados involucrados.

Primero iniciarán en Sinaloa, donde trabajarán en un polígono rectangular que abarca desde el sur de la entidad hasta una parte de Durango y fue diseñado estratégicamente donde se dan las mejores condiciones de nubosidad, a fin de obtener el máximo efecto de la precipitación que se pretende generar.

Los recursos presupuestales en esta etapa son 100% del orden federal y se contará con apoyo de la Fuerza Aérea Mexicana, a través de su base aérea número 10, con sede en Culiacán, indicó la Conaza, organismo de la Secretaría de Agricultura.

Con la estimulación de la lluvia se espera la recuperación de la humedad en el suelo, lo que permitirá el crecimiento de alimento para el ganado, la siembra de cultivos de temporal y se realizará un monitoreo de la entrada de agua a las presas.

De igual forma operará el proyecto en Sonora y en Chihuahua, sin embargo, no dieron detalles de cuándo y qué zonas, como lo exponen con Sinaloa.

La Sader resaltó que Comisión Nacional de las Zonas Áridas (Conaza) delimitó un polígono de trabajo que comprende dos millones de hectáreas para cada uno de los estados donde habrá estimulación de lluvias y es el doble de tamaño respecto al millón de hectáreas que comprendió el proyecto piloto en Baja California.

Proyecto piloto, pruebas en Baja California

La dependencia federal recordó que este proyecto operó con éxito en Baja California durante febrero y marzo pasados, en una extensión de 1,015,221 hectáreas que comprenden el poblado de San Vicente y la zona agrícola de San Quintín.

El programa piloto benefició a 10 mil habitantes en la zona de influencia del perímetro y a tres mil ganaderos mediante las precipitaciones que impactan en los mantos acuíferos y abastecen de agua bordos, arroyos y represas.

El polígono de trabajo comprendió una zona productiva con alto valor de producción, de alrededor del 10% de la agricultura de Baja California, que representa aproximadamente en 30 por ciento en la economía estatal.

La producción tecnificada tiene lugar sobre todo en cultivos de fresa, berries y hortalizas. Sin embargo, el principal impacto de este proyecto se refleja en la cobertura vegetal, en la flora y en la fauna regional casi extinta.

Asimismo, en abril pasado, mediante una operación coordinada con la Secretaría de la Defensa Nacional, se realizó la aspersión de yoduro de plata en las nubes sobre municipios de Nuevo León y Coahuila para generar lluvias y coadyuvar con los trabajos realizados por las autoridades civiles y militares en el combate a un incendio forestal.

Agricultura explicó que este método desarrollado con tecnología mexicana —amigable con el ambiente— replica las condiciones de la naturaleza con la aplicación de las leyes de la física del agua y la inyección de núcleos de condensación, detonantes de una reacción desencadenante en la nube.

Es decir, al liberar las moléculas de yoduro de plata en la nube, su estructura molecular hace que se posen en ella los cristales de hielo, liberando energía desencadenante que empuja la fusión de otros cristales para formar una gota y miles más, con lo que inicia la precipitación.

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