El día de ayer portales de noticias y la comunidad en Baja California dieron a conocer que se encontraban consternados tras el terrible asesinato de una bebé de un año y su hermanito de entre 1 y 3 años a manos de su padre, quien huyó de Estados Unidos con ellos y los asesinó en el puerto de Rosarito con un arpón para pescar y pósteriormente intentó regresar a su país “como si nada”.
De acuerdo con los reportes, a las 08:55 horas del lunes empleados del rancho «El Descanso» en Rosarito identificaron manchas de sangre. Al seguir el rastro, llegaron a un punto de terracería con arbustos secos en donde hallaron los dos cuerpos.
Ambos cadáveres presentaban múltiples mutilaciones y vestían solo un pañal.
“Uno de los niños, el menor, tenía una lesión en el pecho elaborada con arma blanca mientras que el segundo tenía una herida pectoral del lado izquierdo con el mismo tipo de arma”, relató el Fiscal de BC.
Tras indagar el caso descubrieron que el hombre, identificado como Matthew Taylor ‘N’, ingresó por la la localidad de San Ysidro, Estados Unidos, hacia Tijuana el día 9 de agosto tras secuestrar a sus hijos en California.
Posteriormente se hospedó en un hotel donde presentó su licencia de conducir como identificación, y con ello se pudo conocer el nombre, edad y lugar de residencia del presunto asesino.
Tras apuñalar al niño en 17 ocasiones con el arpón para pescar y a la niña en 11 ocasiones, abandonó los cuerpos e intentó regresar a EU, donde fue detenido.
«Iba en su vehículo Mercedes Benz por la garita San Ysidro para cruzar a Estados Unidos y fue detenido por la CBP. Ya tenía una alerta por sustracción de menores», relató el fiscal Hiram Sánchez.
“Es una persona con estudios y maestría en el idioma español, además de contar con una escuela de Surf en el condado de Santa Bárbara, California, y ese mismo deporte lo llevó a recorrer varias partes del mundo”, agregó.
El hecho conmocionó a nivel estatal así como a la comunidad estadounidense.